Cuando estaba en India uno de mis planes favoritos era ir a ver películas bollywood. La musica me encantaba y aunque la película era en hindi con algunas palabras en inglés, no me importaba, la idea general de la película se podía seguir y para mí, la música era lo que mas importante. Una de las películas que más me gustó fue Once upon a time in Mumbai, las canciones me parecieron super bonitas y la trama de la película me gustó. Es un poco raro pensar que a uno le pueden parecer lindas unas canciones de las cuales no entiende ni una sola palabra, pero creo que a veces el gusto musical va mucho más allá. Corresponde a sensaciones, emociones, ritmos e imaginarios de lo que creemos se esconde detrás de las letras de las canciones.
Me acuerdo que mi compañera de habitación me pasó todas las canciones que tenía en su teléfono y a mi me encantaba escucharlas por la noche. De hecho por las noches o por los mañanas, cuando prendía el televisor que estaba en la cocina de la casa donde vivíamos, el canal que me gustaba poner era MTV, porque salían todas las canciones con los vídeos y me imagina que era yo quien bailaba y me sabía las coreografías a la perfección. Tantas fueron mis ganas de adentrarme a la danza bollywood, que el año pasado decidí inscribirme a clases de danza bollywood acá en Paris. La profesora bailaba increíble, bailaba con un estilo y una perfección envidiables, y cada sábado entrenábamos juiciosamente la coreografía. Aunque finalmente no seguí, creo que la idea de ser una de las bailarinas de uno de los vídeos que veía en MTV aún hace parte de mi imaginación.
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